Desde Fitness Financiero ® siempre buscamos que te plantees cuestionamientos que te lleven a la reflexión, por lo que hoy te traemos este nuevo artículo.
Te has preguntado en alguna ocasión si ¿la capacidad de generar ingresos y la manera de administrarlos se rigen por habilidades diferentes?
O tal vez te has preguntado:
- ¿en qué fase de tu vida financiera te encuentras?
- ¿qué te falta por aprender de esas habilidades necesarias y cuáles errores pudieses evitar?
Hace un tiempo nos planteamos todas estas interrogantes con mi gran amigo Martín González.
Tincho además de Contador Público es Coach Ontológico, Master en Programación Neurolingüística y está dedicado a la docencia y capacitación en temas financieros desde hace más de 20 años.
Junto a él nos dedicamos a crear «una analogía de tu vida financiera con el vuelo de un avión», con la finalidad de poder compartir contigo conceptos y similitudes que en ocasiones nos resultan complicadas de entender.
Quisimos exponerlo de una forma sencilla con la intención de que te plantees la misma analogía.
Aprovechando el aporte de descubrir y transitar definiciones que te permitan generar cambios en tu vida y por ende… «tu despegue financiero».
Habilidades necesarias para tu despegue financiero
Tu vida financiera y el vuelo de un avión
Seguro te preguntarás cómo se presenta exactamente la analogía del vuelo de un avión con tu vida financiera.
En el caso del vuelo, el avión se prepara, realiza su despegue, asciende, alcanza su velocidad crucero, vuela/planea, se dirige a su destino, después desciende y aterriza.
Verás que en cada una de las etapas acontece algo diferente, al igual que en tu vida financiera.
Despegue y ascenso
Al inicio de nuestras vidas no sabíamos nada acerca del dinero.
En algún punto, algunos de forma temprana, empezamos a generarlo con alguna actividad, un empleo, un trabajo en relación de dependencia u otros tal vez con sus propios emprendimientos.
Esa generación de ingresos la veríamos como “el despegue”.
Dentro de nuestra analogía del vuelo de un avión, vamos a tomar también en consideración su estructura.
Un avión estándar tiene dos alas y en esas alas se encuentran las turbinas, las que necesita para despegar y ascender.
Cada turbina va representar un aspecto de tu vida financiera.
La primera turbina será la GENERACIÓN de dinero, tu flujo de fondos.
Y la segunda representa la ADMINISTRACIÓN de esos fondos.
En la primera generas los excedentes de dinero (diferencia entre ingresos y gastos), comienzas a hacerte de ese preciado recurso para conseguir el nivel de vida elegido.
Con la segunda comienzas a consolidar tu patrimonio.
Para que quede más claro:
- Generación de dinero -tu flujo de fondos-: que al compararla con tu vida financiera sería asimilable como la fase de construcción patrimonial (generando ingresos por encima de tu nivel de gastos, obtienes ahorros que luego podrás volcar en bienes durables o inversiones).
- Buena administración de tu patrimonio: que al compararla con tu vida financiera sería asimilable a la fase de consolidación patrimonial, en la cuál te enfocarías en ordenar, administrar y proteger todo tu dinero, bienes y los excedentes que has generado.
Velocidad crucero
Después del “ascenso” alcanzas la velocidad de crucero, aquella velocidad constante y uniforme que llevas en condiciones normales de presión y temperatura, sin sufrir perturbaciones o variaciones de altura y resistencia en el vuelo.
Aún cuando pudieses volar con una sola turbina, definitivamente será más fácil y seguro volar con las dos turbinas operando de forma adecuada.
Es importante reconocer que son diferentes las habilidades necesarias para poner en marcha cada una de esas turbinas.
Y en algunos casos pueden llegar a ser incompatibles, dependiendo de tu perfil y caso en particular.
En otras palabras, puedo ser un excelente “generador” de dinero, y un pésimo “administrador” del mismo, o viceversa.
Si las dos turbinas no están bien posicionadas o alineadas las turbulencias que se presenten durante el vuelo nos pueden generar una “mala experiencia”.
O incluso, casionarnos muchos daños.
Por lo que resulta muy importante conseguir un equilibrio entre las dos, es decir un equilibrio entre la generación de los fondos y la administración de los mismos.
Es necesario que tus dos turbinas se encuentren bien posicionadas para ejecutar un vuelo apacible y efectivo (orientado a tus resultados deseados).
Además que sea posible que reacciones de forma inmediata antes los inconvenientes que puedan surgir.
Un error típico...
En este sentido te comentamos uno de los errores típicos que se pueden presentar en esta etapa de ascenso y vuelo en velocidad crucero.
Algunas personas se enfocan constantemente mucho más en la primera turbina (generación) que en la segunda (administración).
Se dedican solamente a la generación de dinero y con ello logran que un motor se encuentre compensando al otro.
No piensan a largo plazo y tampoco registran sus ingresos y gastos por rechazo al orden y disciplina, por destacarse siempre como generadores natos.
El acto de generar en la primera turbina resulta una excelente toma de acción al principio, durante el despegue o también durante el descenso.
Pero, no se puede abandonar la segunda turbina.
El arte de saber cómo administrar ese flujo de fondos debe mejorarse durante el vuelo y mantenerse al alcanzar la velocidad crucero, hasta el descenso y aterrizaje.
La meta sería alcanzar un flujo de fondos robusto y creciente, eligiendo alternativas que no lleven al agotamiento físico, emocional y mental.
Sabiendo que si logran mantenerse estables las turbinas se podrán apalancar mutuamente.
Volviendo a la analogía del viaje en avión, sería como llegar al destino deseado, teniendo un vuelo placentero.
Estructura del avión y pasajeros
Se deben considerar otros aspectos importantes que definirán cómo se va a desempeñar la trayectoria del vuelo, como:
-La estructura del avión, los pasajeros y obviamente el destino.
Conseguirás un vuelo más fácil y con menos imprevistos dependiendo de lo robusto que sea tu avión, la cantidad de pasajeros que tengas a cargo y la tripulación que te acompañará.
No es lo mismo direccionar un avión para muchos pasajeros que para pocos.
Y en ese caso podrías necesitar un avión más grande, con una tripulación o grupo de personas que te acompañen más grande.
Que además se encuentren dispuestas a desempeñar su labor de forma constante y comprometida.
Si comienzas a generar dinero en exceso con una sola de tus turbinas y careces de las habilidades necesarias que te permitan mantener la segunda turbina…
Empezarás a ver ¡deficiencias en el vuelo!
El exceso de dinero y la falta de administración pueden llegar a esclavizarte.
Evita convertirte en un esclavo de un estilo de vida grandilocuente que sea difícil de sostener (algo así como trabajar más de lo debido para “financiar” el costo del avión grande).
Porque al momento de plantearte posibles cambios en tu nivel de vida, en tus intereses y aspiraciones será mucho más sencillo gestionar esos cambios.
Recuerda que existe mucha gente que se construyó una cárcel de lujo y le cuesta mucho más poder salir de allí que el precio que le costó acceder.
Por lo cual es recomendable tener muy consciente nuestro nivel de vida.
Además reconocer quiénes son esas personas que dependen de nuestra pericia para así tomar decisiones coherentes para nuestro bienestar, el de nuestros pasajeros y la tripulación que nos apoya.
Otro error típico...
Esta falta de conocimiento o consciencia del nivel de vida que manejamos y cómo mantenerlo se presenta como otro error muy frecuente en la vida financiera de muchos.
No ser conscientes de su estructura de gastos.
Recuerda que cuánto más pesado esté tu avión, más difícil será para tus turbinas mantener el vuelo.
Allí radica la importancia de mantener una estructura de gastos atlética o en forma.
Cuanto menor sea la carga de tus gastos recurrentes, menor la cantidad de ingresos necesarios, y por ende menor el peso sobre tus espaldas.
Para entenderlo en referencia a nuestra analogía lo plantearíamos así:
- Cuantos más pasajeros tengas en tu avión mayor será la envergadura que necesites, por ende mayor el costo en combustible y mayor la tripulación.
El vuelo de un avión al igual que tu vida financiera conforman procesos de transformación en los que se requiere estudiar las diversas opciones, trazar un destino claro y tomar decisiones coherentes.
El destino
El destino que eliges, no solo define el tipo de avión que precisas para el vuelo, sino también la tripulación y la ruta.
Si mantienes un equilibrio entre las 2 habilidades necesarias que requieres para mantener tus turbinas bien posicionadas y además te encargas de mantener tu GPS ajustado, probablemente te evitarás inconvenientes y sabrás cómo manejar las turbulencias que se presenten.
Si existe un plan de vuelo estipulado, planeado y organizado, seguramente va a admitir cambios si son necesarios, aunque tengas un destino y ruta ya trazada.
De ser necesario cambiar la ruta dependerá de una decisión coherente y planificada con antelación.
Por lo que siempre resultará beneficioso que logres diversificar tus fuentes de ingresos para lograr maniobrar algunos imprevistos.
Ten en consideración que para conquistar la independencia financiera es indispensable:
- estudiar las opciones con las que cuentas,
- elegir con inteligencia y,
- poner en práctica todas las opciones con sabiduría y templanza.
En ello radica la importancia de tener un punto de partida que sería tu situación actual y un punto de llegada deseada para establecer objetivos de inversión coherentes y realizables.
Elegir tu destino y la ruta con antelación resulta vital.
El piloto nunca despega sin preestablecer un destino específico y sin marcar una ruta porque de ello va a depender su subsistencia, en términos de combustible y energía necesaria para sostener el vuelo.
Ten en consideración que incluso un destino muy ambicioso puede requerir un avión más grande, con más requerimientos de los que cuenta en el momento de su despegue.
Durante el vuelo
- ¿Qué pasa después de planear tu vuelo y de tomar esas decisiones importantes que te ayudaron a elegir el tipo de avión, el número de pasajeros y la tripulación?
- ¿Y qué pasa después de trazar una ruta (sabiendo que puede admitir cambios), luego de que ya despegaste y alcanzaste la velocidad crucero con tus 2 turbinas funcionando?
Ahora te dedicas a mantener el curso antes planificado, afrontando los inconvenientes o imprevistos que puedan surgir hasta llegar a tu destino deseado.
En esta fase te encontrarás con tus dos turbinas trabajando en equilibrio, tu turbina de la generación de ingresos y la de administración.
Como lo mencionamos anteriormente, no sólo comienzas a generar los ingresos necesarios para mantener en funcionamiento tu avión, sino que paralelamente generas excedentes de dinero, los cuáles empezarás a multiplicar.
Tomar la decisión de sostener un plan de inversión elaborado conscientemente, a mediano y largo plazo, sin entrar y salir por vaivenes emocionales, resulta una excelente estrategia.
Al determinar cómo continuar con la fase de construcción patrimonial te encontrarás trabajando de forma paralela la fase de consolidación patrimonial.
Es decir, ubicarás diversas alternativas de inversión, dentro de las cuáles podrás elegir si son “más seguras pero lentas” o si son “más rápidas pero más riesgosas”.
Similitud dentro del vuelo cuando el piloto debe cumplir un protocolo por la seguridad propia y de todas las personas a bordo que se debe respetar, solo con excepciones de fuerza mayor.
Como piloto de tu avión te preguntarás cómo quieres transitar la ruta que elegiste si quieres continuar el viaje por aquella ruta segura…
O te gustaría tomar un atajo con múltiples tormentas e imponderables que puede que hagan de tu viaje un martirio.
Además comenzarán a surgir preguntas como:
- ¿Estoy apto para afrontar una turbulencia continua?
- ¿Quiero realmente tomar menos riesgos e ir más lento o prefiero tomar riesgos desmedidos? ¿Para qué hacerlo? ¿Realmente vale la pena?
El piloto y su experiencia
Es seguro que sabías que cuando un piloto acaba de obtener su título no lo dejan salir a volar inmediatamente.
Necesita acumular “horas de vuelo reales”, debidamente supervisadas por otros colegas de mayor experiencia.
En otras palabras, las horas de vuelo o experiencia, valen mucho más que el título habilitante en sí mismo.
En tu vida financiera ocurre lo mismo, cambiarás y moldearás tus decisiones dependiendo de la experiencia que vayas acumulando en el transitar.
Vas a ir sumando horas de vuelo al experimentar situaciones diversas.
Llegarás a responderte cómo te desenvolviste emocionalmente manejando situaciones que no estaban bajo tu control.
Porque poco a poco dependiendo de lo que suceda te darás cuenta que en algún punto es posible que la lógica del vuelo cambie cuando tus pasajeros y su vida dependan de ti.
Esas experiencias vividas por ti mismo, tengas conocimiento o no de los errores de otros, son las que te proporcionarán sabiduría.
La experiencia en las finanzas no las da necesariamente el conocimiento técnico, sino las horas de vuelo… la vida misma, experimentada en “primera persona”.
Conocerás lo que implica haber demostrado que puedes mantener tu avión a flote ante diversas circunstancias no controlables, y que la templaza emocional es lo determinante.
Como por ejemplo el anclaje emocional que sientes con el dinero y cómo lo has ganado, además de cómo te sentirías al perder parte o todo de lo que has conseguido.
Esas experiencias solo se pueden vivir en primera persona.
Si alguien quiere transitar por el camino de las inversiones resulta mucho mejor que sea de una manera cuidada y con mucha paciencia.
Y con estrategias de inversiones a medio o largo plazo que sean pensadas y testeadas tal vez por otros.
Y así… atravesar con cautela las turbulencias y tormentas que puedan surgir.
Es importante que conozcas que gran parte de estos aprendizajes son emocionales más que técnicos.
Por eso es igual de importante el conocimiento técnico que adquieras como la posibilidad de ponerlo en práctica para sumar aprendizajes propios.
Descenso y aterrizaje
Llegado el momento del «descenso» resulta importante también planificarlo inteligentemente.
Puedes planificar tu retiro con anterioridad y planificar cómo manejarás tu herencia para evitar inconvenientes en un futuro en el que ya no te encuentres.
Se te van a presentar opciones como realizar una «desinversión» para destinarla a un consumo inteligente y gratificante o para realizar una inversión diferentes, acorde a tu nueva realidad.
Es el momento en el que recordarás el porqué elegiste el tamaño de tu avión, tomando en consideración tu destino y la cantidad de pasajeros.
Y te percatarás que existen momentos en los que era necesario más espacio porque tenías más personas a bordo, dependiendo de la etapa de tu vida tal vez serían tus hijos, tus padres u otros familiares dependientes.
Pero, ¿qué pasa cuando esos pasajeros ya no son dependientes o también ellos ya comenzaron su propio vuelo?
Responde ahora: ¿realmente necesitarías el mismo avión?
Quizás puedes empezar a volar más liviano para hacer tu viaje más largo, reduciendo la envergadura de ese avión para achicarlo y para disfrutar de otras alternativas.
Hasta incluso puedes escoger la opción de “apagar” los motores y empezar a planear antes de aterrizar.
Qué grato sería que además de planificar el dinero necesario para tu retiro, establezcas tu propia inversión en tiempo «de calidad» y en otras actividades que disfrutes.
Preparando el aterrizaje...
Para cuando llegue el momento del «aterrizaje» resulta igual de importante que pienses cuál será el legado que dejarás.
Tal vez desees que recuerden más la educación financiera que impartiste con tu ejemplo, que el dinero en sí mismo.
O si es tu decisión compartir una herencia (bien sea en dinero, bienes o tu negocio) es fundamental que lo planifiques con anticipación.
Con el fin de adelantarte a los temas de impuestos, sucesiones o cualquier otra acción y sin ningún tipo de problemas familiares.
Recuerda que seguramente querrás dejar un legado (inmaterial o material) que “le sume” a tus seres queridos, y no dejarles un “legado de problemas”.
Sé que puede ser complicado que te plantees que algún día no estarás físicamente, y que adicionalmente no estarás para hacerte cargo de tu empresa o negocio.
Pero,
- ¿Te has planteado dejar un testamento que evite algún enfrentamiento o desigualdad en la repartición?
- ¿Has pensado dejar una sucesión que evite que tu preciado patrimonio se esfume sin dejar la huella que has querido mantener en tu propia historia de vida?
- ¿Te encuentras preparado para proteger a los que amas y el patrimonio que con tanto esfuerzo generaste?
Todas estas y otras interrogantes te surgirán en el momento de planificar un aterrizaje consciente e inteligente.
Requiere una gran audacia y mucha cautela conseguir una gran fortuna, y cuando ya la tienes, se requiere diez veces más habilidad para conservarla.
Ralph Waldo Emerson
Antes de despedirnos y que comiences tu despegar financiero...
Si te gustaría profundizar sobre estos temas, te dejamos un vídeo regalo REVÍSALO AQUÍ.
Además comparte con nosotros tu opinión en la caja de comentarios, nos encantará leerte.
Fabi Fiorito
Disclaimer
Antes de despedirme quisiera afirmar que nada de lo que aquí compartimos debe interpretarse como un consejo de inversión o recomendaciones de compra o venta de algún activo en particular.
Fitness Financiero ® es una plataforma de educación financiera y nuestro objetivo es despertar la reflexión y generar conciencia en temas de Dinero y Finanzas Personales. Todo nuestro contenido lo compartimos con fines educativos.
Por eso, cada persona es responsable de sus propias decisiones de inversión y debe analizar su propio contexto, situación, perfil de riesgo, objetivos de inversión y alternativas disponibles para tomar las decisiones adecuadas a su realidad particular.
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