Hace unos días estuvo de visita mi Vieja y surgieron un par de charlas interesantes respecto de las oportunidades o golpes que suele darte un país como Argentina y me acordé de una idea que tuvo mi Mamá hace 22 años acerca de tener su propia jubilación y que te quiero contar como una estrategia ahora…
Tener tu propia jubilación (adicional a la del Estado)
En aquella época, año 2001, mi Mamá estaba en un período profesional muy bueno, consolidado luego de una excelente carrera profesional que había despegado luego de que mi hermana y yo habiamos crecido y ella dejó de volcar tanta energía en su rol materno, por el que ambos estaremos eternamente agradecidos.
Y volviendo al punto, resulta que la habían contratado para asesorar sobre una reforma en el sistema educativo en Argentina.
Ella, con buen criterio, se daba cuenta que ese sueldo extra que iba a recibir, no lo necesitaba en ese momento y decidió ahorrarlo íntegramente.
Durante 4 años, cobraba ese sueldo extra, iba al banco de la esquina de la 25 y Corrientes a ver a mi amigo Sebastian que era el Gerente de la sucursal, cambiaba los pesitos por dólares y Sebas colocaba esos dólares en un Fondo Indexado de Acciones internacionales con rendimientos en dólares de entre 7% y 12% históricamente.
Era una época muy buena en Argentina, estabamos bajo la Ley de Convertibilidad que habia traído mucho crecimiento y nuestra moneda era fuerte, un Peso era equivalente a un Dolar Americano.
Fueron 4 años de sueldos invertidos mes a mes de ese modo.
El instinto materno es más fuerte que la inteligencia financiera
Yo recuerdo perfectamente que había logrado acumular el equivalente a un departamento en ese fondo.
Y lo recuerdo, porque resulta que, luego de un par de años mudado a Buenos Aires comencé a evaluar la posibilidad de dejar de alquilar y comprarme algo. Habíamos visto algunas propiedades y había una en particular sobre Luis María Campos, a un par de cuadras de Santa Fe, edificio nuevo, departamento a estrenar, lindísmo! Costaba unos US$92.000 aproximadamente y con los gastos hubieran sido unos US$100.000.
Mi vieja, apenas se enteró de lo que pretendía hacer, no dudó en ofrecerme su dinero… su jubilación «extra», sin condiciones… «vos me lo devolves después más adelante, cuando puedas», me dijo…
Y la verdad que para mí, en aquel momento era la única manera de comprar.
Mis ahorros completos, mi auto y un crédito que había sacado en la Caja Popular de Ahorros de Tucumán se habían transformado en mi ticket de entrada a mi vida en Buenos Aires para mi posgrado en Finanzas en el CEMA y poder vivir en la Ciudad de la Furia.
Tenía un buen trabajo, con un sueldo razonable, pero todavía no me permitía acceder a un crédito hipotecario para comprar un departamento como ese.
La oferta de mi Vieja me resultaba muy tentadora, pero… recuerdo que pensé lo siguiente:
- Ya estoy grande para que me sigan ayudando mis viejos, es hora de hacerme cargo del todo de mi vida y mi independencia
- No le puedo gastar esa jubilación extra a mi vieja, es su dinero, la idea que tuvo está buenísima para su futuro
- Ya voy a poder comprar más adelante cuando se den las condiciones…
Así que le agradecí, le expliqué mis razones y decidí no agarrar ese dinero así le permitía seguir creciendo y acumulandose para su futura jubilación.
La idea estaba super bien, de hecho, yo pensaba hacer lo mismo para mí en algún momento más adelante.
Argentina… retrocede 7 casilleros en el juego de la Oca
La estrategia de suplementar tu jubilación para estar más holgado estaba genial!
Invertir a largo plazo un excedente en acciones internacionales que rindan en promedio 10% en moneda dura, también!
El problemita fue la implementación táctica de la estrategia… ¿por qué?
Bueno, porque estábamos a unos cuantos meses de otro colapso económico de proporciones importantes en Argentina… pero ¿cómo íbamos a saberlo?
Para simplificarlo, la cosa fue así:
- En Mayo 2001 habían en el fondo US$ 115.000
- En Enero 2002 se habían transformado en US$ 105.700 por alguna caida en los mercados internacionales.
- También, en ese momento, dejaron de ser Dólares… Argentina abandonaba la Convertibilidad y se pesificaban los depósitos a AR$1,6 por dolar, transformandose el fondo en AR$ 169.000
- Tipo de cambio libre en ese mismo momento:AR$4 por dolar, casi 3 veces más que el tipo oficial.
Es decir que, el fondo de retiro de mi Vieja pasó «de la noche a la mañana» a US$ 42.300 (un sablazo del 60%!!!)
Inevitable preguntarme ¿qué hubiera pasado si yo hubiese aceptado ese dinero?
Me costó no sentirme un papanata por no haber tomado 9 meses antes el dinero de mi Vieja que para ese entonces hubiera estado resguardado en ladrillos y yo viviendo ahí.
Mi vieja con muchas ganas de hacer la receta típica del 99% de los Argentinos: agarrar cualquier mango que sobra, comprar dólares y guardar en el colchón.
Hasta aquí lo que pasó…
Y si hubiéramos cambiado «el caballo»?
Ahora te voy a compartir el análisis que hice y los números que armé para responder algunas de las preguntas de mis hijos con motivo de esta anécdota compartida. Básicamente, analizamos qué hubiera pasado si, manteníamos exactamente la misma estrategia, pero… invirtiendo en la bolsa americana, en lugar de hacerlo en un Banco Argentino.
Los supuestos que hice fueron simplemente tomar el fondo de US$115.000 en Mayo 2001 y «sacarlo» del Banco amigo para enviarlo a un broker americano y comprar con ese dinero un fondo que replicase el comportamiento del indice S&P500.
Lo dejé invertido ahí hasta Mayo de 2023, es decir, durante 22 años, y para aprovechar las tasas internacionales actuales, sacamos todo el dinero y compramos un bono «libre de riesgo» del tesoro americano que hoy rinde 5% (sería como hacerle un plazo fijo a USA).
Y aquí están los resultados de este experimento:
- Hoy, mi vieja tendría una «jubilación extra» de AR$ 770.000 por mes!!!
- Esto equivale a US$1.500 aproximadamente por mes
Quizas no sea mucho dinero en algunos países de Latinoamérica, pero para Argentina hoy es una fortuna!
Basta comparar con la jubilación mínima que es de AR$ 71.000. Es decir, la estrategia de suplementar jubilación estatal con tan solo 4 años de excedentes rindió 11 veces la jubilación mínima.
No tengo idea cuanto será hoy en día una jubilación promedio en Argentina pero muy probablemente no llegue a esos AR$770.000 mensuales.
Tan sólo 4 años de aporte en un fondo de acciones internacionales en moneda dura le ganan a 45 años de aportes en el sistema estatal. TRE-MEN-DO!!!
Y todo esto, a pesar que a la bolsa americana le fué «pésimo» en este período
Lo más loco de todo es que a la bolsa americana durante esos 22 años le fue bastante mal, ya que rindió tan sólo un 5,6%, mientras que el promedio histórico está alrededor del 10%.
Los US$115.000 se transformaron en US$ 380.000 en nuestro experimento invirtiendo en el S&P500 (bolsa americana). Pero podrían haberse convertido en mucho más si la bolsa americana nos hubiera entregado los retornos «promedio» históricos.
Y aquí quiero detenerme para mostrarte algunas dificultades que te vas a encontrar al implementar estrategias de este tipo a largo plazo, lo que algunas veces pueden incluso llevarte a «abandonarlas» en el camino.
Separo a continuación nuestro experimento en 3 etapas temporales para mostrarte claramente lo que digo.
Etapa 1: 2001-2005
Empezamos con los US$ 115.000 y terminamos con US$ 115.000.
En el medio, una montaña rusa no apta para cardíacos.
Con el atentado a las Torres Gemelas la bolsa americana cayó bastante, al punto que le tomó 4,5 años para recuperar los niveles previos. Como puede verse en el gráfico a continuación:
Etapa 2: 2005-2010
Otra vez sopa, arrancamos con US$115.000 y terminamos con US$115.000. Parece una broma, pero no lo es…
En 2008 tuvimos la peor crisis financiera global de los últimos 100 años.
Básicamente, una década «perdida» por completo como puede apreciarse en el gráfico.
Etapa 3: 2010-2023
Aquí ya se empiezan a percibir los resultados de la estrategia y el fondo «despega», pero con algunas turbulencias y sacudones importantísimos…
La parte «difícil» de esta estrategia
Con el Diario de ayer, es fácil opinar y nos damos cuenta muy fácil cuál es la decisión acertada. Opinamos, somos valientes y creemos que la cosa es fácil… pero, la realidad es que las decisiones financieras las tomamos HOY, y nunca sabremos lo que puede pasar mañana… y cuando ese futuro se va develando ante nuestros ojos, eso nos produce todo tipo de reacciones emocionales que debemos dominar para poder invertir con éxito.
Te pregunto y me gustaría que te respondas lo más honestamente posible:
- ¿Si vieras que tus US$115.000 están cayendo, ¿en qué momento venderías? US$110k, US$100k, US$90k, US$70k?
- ¿Quién se aguanta casi 5 años para «tan sólo recuperar» la inversión inicial?
- Y si lograste aguantarte esos 5 años, y vuelve a ponerse «bajo el agua» como pasó en este caso…
- ¿Pensarías que esta sigue siendo una «buena inversión»?
Si sos como la mayoría, lo más probable es que hubieras vendido en alguna de esas caídas y no tendrías demasiadas ganas de seguir jugando este juego… como le pasó a mi Mamá.
La parte «fácil» de esta estrategia
Aunque muchas veces pensamos que nos faltan los conocimientos técnicos, que es complejo invertir en bolsa, etc.
La realidad es que todo eso se adquiere con facilidad, las herramientas no son complejas cuando te animas y te acompañamos en la implementación de un plan como éste. No es tan importante saber en qué invertir, o cuando hacerlo.
Lo más importante es simplemente HACERLO!!! 🙂 y poder mantenernos en el camino trazado, confiados y dominando nuestras emociones.
Voy a cerrarte este pequeño experimento de lo que podría haber sido un suplemento a tu jubilación estatal, cambiando una vez más «el caballo».
En este caso, en lugar de invertir en la Bolsa Americana, vamos a invertir en un activo super tradicional, que es reserva de valor y que tiene siglos de historia… me refiero al Oro.
Veamos a continuación, cómo nos hubiese funcionado con el siguiente gráfico:
Aquí podemos ver que en la «década perdida» en la que la bolsa americana subió y cayó hasta los niveles iniciales de nuestro ejemplo, el oro por el contrario tuvo un rendimiento fabuloso! muy por arriba que las acciones.
El oro funciona mejor en épocas de crisis, alta inflación y volatilidad en los mercados financieros.
En este ejemplo, podemos ver cómo si hubiéramos invertido esos US$115.000 de Mayo 2001 en Oro, tendríamos luego de 22 años US$875.000.
Nada mal para una estrategia de invertir excedentes de tan sólo 4 añitos como contaba al principio de este post.
Fijate también como el Oro simplemente «se estanca» en la 2da década de este ejemplo, que es justamente cuando la bolsa comienza a «funcionar» y a generar rendimientos. Es decir, el oro es contra-cíclico. Por eso, es una reserva de valor.
Y como es muy difícil de predecir el futuro, por no decir, imposible, quizás una tercera posibilidad sería simplemente «diversificar» nuestra cartera para incluir tanto al oro como también a la bolsa americana, en la proporción que cada quien considere más adecuada.
Y si tuviéramos que hacer esto HOY para los próximos años?
Siempre quiero recordarte que desde Fitness Financiero no damos consejos de inversión. Por eso, nada de lo que acá se dice debe interpretarse como un consejo de compra. Nos gusta aportarte herramientas para que puedas tomar tus propias decisiones inteligentes con tu dinero, para Tu Bienestar y el de tu familia.
Si tuviera que implementar hoy una estrategia similar a la que mi Mamá quizo hacer hace 22 años, podríamos agregar un ingrediente más a la receta: una fracción pequeña de Bitcoin.
Es decir, ese fondito podría contener: Acciones internacionales (la mayor proporción), Oro (lo que te guste) y una pequeña porción de Bitcoin. Tan sólo un 5% o 10% de Bitcoin podría funcionar muy bien a largo plazo. Esto último puedes profundizarlo en este otro post donde simulamos un fondo de retiro con Bitcoin.
También, puedes ver este otro post que escribí hace varios años en el que te comparto los problemas que veo a los sistema de jubilación estatales y la importancia de que puedas armar a tiempo tu propio fondo de retiro.
Deja una respuesta